"¡Yo soy del pueblo, he nacido aquí. Tú no eres del pueblo!". Estas palabras tuvo que escuchar Nidhal Gharsi, empresario tunecino residente en Cala Rajada desde hace 12 años, de boca de un policía local de Capdepera. Su supuesto 'delito' era haber aparcado mal el coche para dejar a sus dos hijos de corta edad en el colegio. Tras el incidente, denunció en el cuartel de la Guardia Civil de Artà la supuesta discriminación racista que había sufrido.

Las primeras palabras que le didirigió supuestamente el agente fueron que "era un maleducado" por estacionar mal el coche. Nidhal se excusó por la premura en dejar a sus hijos en el colegio y no haber encontrado antes ningún sitio idóneo para aparcar. "Acaté la multa que me pudiera corresponder, pero le dije que era del pueblo y sabía que estas cosas ocurrían", indica. Cuando el policía le dijo supuestamente que "no era del pueblo" no supo cómo reaccionar. "Me quedé en blanco ", apunta.

Los hechos ocurrieron sobre las nueve de la mañana del pasado 12 de enero en Cala Rajada. Nidhal conducía el coche para llevar a sus dos hijos de tres y seis años al colegio. "Después de dar dos vueltas, no encontré sitio para aparcar", recuerda. Tras no encontrar un hueco, el residente estacionó en un lugar prohibido antes de acompañar a sus hijos hasta la puerta del centro escolar.

Disculpas espontáneas

Cuando regresó al vehículo, Nidhal se encontró con un policía local tomando fotografías del coche y preparando una multa. "De forma espontánea le pedí disculpas por haber aparcado mal al dejar a mis hijos en el colegio", indica.

El agente le respondió supuestamente con un exabrupto. "Solo los maleducados aparcan como tú", le espetó. Para tratar de limar las asperezas, el residente tunecino contestó al policía que muchos padres solían estacionar allí el coche cuando llevaban a sus hijos al colegio.

"No tenía ningún problema en pagar la multa y se lo hice saber. Le dije al policía que los dos éramos del pueblo y que sabíamos que mucha gente aparca allí al empezar las clases o al recoger a sus hijos", insiste.

La respuesta airada del policía le descolocó por completo. "¿Tú eres del pueblo?¡yo soy del pueblo, porque he nacido aquí!", le replicó el agente. "Me repitió tres veces que yo no era del pueblo. No supe qué decirle. Solo le pedí que me diera la multa en ese momento para pagarla", abunda Nidhal.

Al parecer, el agente que le había increpado no tenía el aparato para expedir las multas en correcto funcionamiento. A continuación, avisó a otro compañero por radio para que le prestara el dispositivo. Unos 20 minutos después, le entregó la notificación de la sanción.

"Ahora tengo miedo. Me dijo que ya tenía mi matrícula y me dijo que a la mínima me iba a multar", resalta. "Somos los únicos tunecinos de Cala Rajada. Yo nunca he tenido hasta ahora problemas de racismo en Mallorca", apunta Nidhal visiblemente dolido.