Una jugadora de voleibol se clavó una jeringuilla en el pie en la playa de Can Pere Antoni mientras practicaba su afición. El suceso se produjo el miércoles sobre las 17 horas y, enseguida, la joven acudió al centro de salud de su barrio, en Palma, pero fue enviada de urgencia al hospital de Son Llàtzer. Allí le practicaron una analítica, tal como establece el protocolo de prevención en casos de este tipo, y le pusieron la vacuna del tétanos, aunque hasta dentro de tres meses, con un segundo análisis, no podrán confirmarle si ha contraído una enfermedad contagiosa, como la hepatitis B o C o el virus del sida, según explicó ayer.

"Me llevé un enorme susto cuando la jeringuilla se me clavó totalmente en el pie y no estaré tranquila hasta dentro de tres meses, por lo menos, debido a que luego hay que hacer otra prueba", tal como lamentó.

La afectada denunció que este caso "es el límite, pero la suciedad es generalizada en la playa. Hay numerosos grupos que acuden a hacer deporte, además de niños de las escuelas", por lo que exige a la empresa municipal Emaya que limpie Can Pere Antoni para que no se repita este suceso.