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Tribunales

Piden tres años de cárcel para una conductora ebria que mató a un ciclista

La sospechosa, imputada por homicidio imprudente, arrolló a la víctima de madrugada en la carretera de Manacor y duplicó la tasa de alcoholemia - La familia del fallecido le acusa también de huir del lugar y reclama seis años de prisión

Efectivos sanitarios, junto al cadáver del ciclista atropellado en la madrugada del 10 de mayo de 2015 en la carretera de Manacor. J. MORANTA

La fiscalía reclama tres años de prisión para una joven acusada del atropello mortal de un ciclista cuando circulaba ebria por la carretera de Manacor, en Palma. La sospechosa, que no se detuvo tras el atropello pero regresó al lugar poco después, duplicó la tasa máxima permitida de alcoholemia. El ministerio público la considera autora de un delito de imprudencia grave con resultado de muerte. La familia de la víctima, como acusación particular, le imputa otro delito de omisión del deber de socorro por haber huido tras el atropello, y reclama en total seis años de cárcel para la conductora. El juicio se celebrará a principios de 2017, después de que las partes no alcanzaran ayer un acuerdo en la vista previa celebrada en un juzgado de lo penal de Palma.

Los hechos, según el relato de las acusaciones, ocurrieron hacia las seis de la madrugada del 10 de mayo de 2015 a la altura del kilómetro 3,5 de la carretera MA-15, cerca del desvío del hospital Son Llàtzer. Una mujer que tenía entonces 33 años circulaba al volante de un Renault Clio con las facultades mermadas por el consumo de bebidas alcohólicas durante aquella noche. Por eso no advirtió la presencia en la calzada de un ciclista de 44 años, a pesar de que este llevaba puesto un chaleco reflectante, y se lo llevó por delante. La víctima impactó contra la luna delantera del coche y cayó sobre el asfalto. Sufrió un traumatismo craneoencefálico y murió en el acto, sin que los servicios sanitarios pudieran hacer nada por su vida.

Tras el atropello, la conductora continuó su camino sin detenerse a auxiliar al ciclista. Sin embargo, poco después regresó al lugar y admitió que era la conductora responsable del atropello. La Guardia Civil la sometió a una prueba de alcoholemia cuyo resultado evidenció que estaba ebria. Dio una tasa de 0,54 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, algo más del doble del máximo permitido. Los agentes la arrestaron y, tras ser interrogada, quedó en libertad ese mismo día. La víctima tenía siete hermanos y pareja estable. La compañía aseguradora del coche que conducía la procesada ha consignado 103.531 euros para indemnizarlos por su fallecimiento.

La fiscalía sostiene en su escrito de acusación que los hechos son constitutivos de un delito de imprudencia grave con resultado de muerte, por el que reclama tres años de cárcel y cuatro de retirada del carné de conducir para la conductora.

Los familiares del ciclista, personados como acusación particular a través del abogado Eduardo Morey, elevan su petición a seis años de prisión para la procesada. Además del delito de homicidio imprudente, por el que solicita cuatro años de reclusión, la considera autora de otro de omisión del deber de socorro por no haberse detenido para auxiliar a la víctima tras el atropello. Por este reclama otros dos años de prisión. Además, pide que indemnice a los herederos de la víctima con 20.000 euros.

La abogada de la sospechosa, por su parte, solicita la absolución. En su escrito de defensa sostiene que los hechos no sucedieron como aseguran las acusaciones y apunta que b, aunque no ofrece un relato alternativo de lo ocurrido. La letrada ha aportado un informe médico sobre el tratamiento psíquico y psicológico que está siguiendo la mujer por un cuadro de estrés postraumático derivado del accidente de tráfico.

Ayer se celebró en un juzgado de lo penal de Palma una vista previa para que las partes expusieran su intención de llegar a un pacto. Sin embargo, la fiscalía, la acusación particular y la defensa no alcanzaron un acuerdo de conformidad. La magistrada, ante la falta de entendimiento, señaló el juicio para mediados de febrero del año que viene.

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