Un vecino de Son Ferrer de 61 años de edad falleció ayer al mediodía después de que el coche en el que circulaba se saliera de la vía en la carretera de Palmanova a Calvià. Los agentes de la Guardia Civil sospechaban que la víctima pudo sufrir una enfermedad súbita, como un ataque al corazón, que le hiciera perder el control del coche, con lo que no se trataría propiamente de un accidente de tráfico, si bien para confirmar este extremo será necesario esperar a la práctica de la autopsia.
El siniestro ocurrió sobre la una del mediodía, a la altura del kilómetro 3,6 de la carretera Ma-1015, que une Palmanova con Calvià Vila. Un turismo Mercedes se salió de la vía por el margen derecho y quedó en un terraplén.
Tras recibir los primeros avisos sobre lo ocurrido, se dirigieron al lugar dotaciones de la Guardia Civil de Tráfico, Policía Local de Calvià y dotaciones de una ambulancia.
Las dotaciones de emergencai que llegaron primero al lugar encontraron al conductor desvanecido en el interior del vehículo. El hombre fue sometido a prácticas de reanimación por parte del personal de la ambulancia, pero todos los esfuerzos fueron en vano, y falleció allí mismo.
La Guardia Civil de Tráfico se encargó de la confección del atestado sobre el siniestro. De la inspección ocular al vehículo no se desprendía que la violencia del choque fuera tan grande como para causar la muerte del conductor, por lo que no se descartaba que el hombre hubiera sufrido una enfermedad fulminante que le hubiera hecho perder el control del vehículo, y que fuera la causa directa del fallecimiento. En cualquier caso, este extremo no podrá ser confirmado hasta que no se le practique la autopsia.
La víctima residía en Son Ferrer, pero acudía con frecuencia a Calvià para ocuparse de un huerto que tenía en las proximidades de la vila.
