La Audiencia de Palma ha condenado a un hombre a una pena de cuatro años de prisión y a una mujer a tres años de cárcel por intentar matar al cliente de un bar de la ciudad apuñalándole en varias ocasiones después de que este les negara un cigarro a mediados de 2015. Los dos sospechosos ayer se conformaron con los hechos, admitieron ser responsables de un delito de homicidio en grado de tentativa y aceptaron las penas que solicitó la fiscalía.

Las defensas y el ministerio público, que apreció dos circunstancias atenuantes como la de drogadicción, alcanzaron un acuerdo. Inicialmente, los agresores se enfrentaban a sendas peticiones de condena de nueve años y diez meses de cárcel.

Los hechos ocurrieron el 6 de abril de 2015, sobre las nueve de la noche, en un bar situado en la calle Torre d'en Bibiloni, en Palma, cuando la acusada, de 31 años, inició una discusión trivial con otro hombre porque este le negó un cigarro. Acto seguido, la sospechosa le estampó un vaso de cristal en la cara. Mientras, el imputado sacó una navaja plegable y le asestó en el abdomen repetidas puñaladas. La mujer le lanzó una botella de cristal y otros objetos hasta que intervino el dueño del local, que redujo al agresor y consiguió que soltara el arma blanca.