Un hombre de 38 años fue detenido el domingo por la tarde por la Policía Local de Palma tras comprobar que estaba viviendo con una mujer de la que tenía una orden de alejamiento. La pareja llamó a los agentes para quejarse de que les habían echado del piso compartido en el que vivían. El incidente inicial no tuvo consecuencias. Sin embargo, luego los agentes supieron que existía una orden de alejamiento entre ambos y arrestó al hombre por quebrantar la medida cautelar.