Caso Abierto - Diario de Mallorca

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Condenado un padre por pegar patadas y puñetazos a su hijo de 5 años

El progenitor aceptó penas de multa y trabajos comunitarios por circular ebrio con un camión en Palma

El juicio que acabó en una conformidad se celebró ayer al mediodía en la sede de Vía Alemania. b. ramon

Un juzgado penal de Palma ha condenado a un padre a penas de multa y trabajos comunitarios por agredir con patadas y puñetazos a su hijo de cinco años y luego circular drogado y bebido, cuadruplicando la tasa máxima de alcohol permitida, con un camión cisterna por varias calles de la ciudad y la autopista de Inca en mayo de 2015. El progenitor, de 31 años, ayer confesó los hechos ante el magistrado tras alcanzar un acuerdo con la fiscalía y la acusación particular. Se declaró autor de un delito de violencia doméstica, otro de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y sustancias estupefacientes y una falta de daños por haber golpeado un vehículo en el que su propia hermana introdujo al menor agredido para protegerle y al que ocasionó desperfectos.

El juez dictó sentencia 'in voce' contra el acusado y le impuso 60 días de trabajos en beneficio de la comunidad, la privación de la tenencia y porte de armas durante dos años y la prohibición de aproximarse y comunicarse con su hijo, también por un periodo de dos años, por haberle pegado patadas y puñetazos y causarle lesiones en el rostro, la cabeza y un hombro. Por la falta de daños, la condena fue una multa de un mes a razón de dos euros diarios. Mientras que por el delito contra la seguridad vial, el joven imputado aceptó seis meses de multa con una cuota diaria de dos euros, además de la privación del derecho a conducir vehículos a motor durante quince meses.

En concepto de responsabilidad civil, la sentencia, que es firme, fija una indemnización de 3.000 euros en favor de la víctima por las lesiones y secuelas que padeció.

El fiscal apreció la circunstancia atenuante de embriaguez y la agravante de reincidencia en el episodio de violencia doméstica, ya que el padre cuenta con varias condenas anteriores por diferentes hechos delictivos. El sospechoso ya ha pagado 400 euros.

La agresión que ayer llegó a juicio se remonta al pasado 7 de mayo de 2015, sobre las cinco de la tarde, cuando el joven se hallaba en estado de embriaguez en los alrededores de un bar de Palma y además había consumido cannabis. El progenitor comenzó a golpear con patadas y puñetazos a su hijo, de cinco años en esas fechas, y le ocasionó diversas lesiones como edema y eritema en párpados, eritema en maxilar, zona retroauricular y temporal, en pabellón auricular y en hombro derecho. El menor tardó siete días en curar de las heridas.

Cuando la hermana del acusado se enteró de lo que ocurría, acudió al lugar, cogió al niño y lo introdujo en su vehículo. Entonces, el agresor empezó a golpear el automóvil y causó desperfectos.

Acto seguido, el padre se alejó de la zona conduciendo un camión cisterna a velocidad inadecuada y dando bandazos por varias calles de Palma y por la autopista de Inca hasta llegar a Marratxí, donde continuó su huida a pie, según la versión del fiscal. Los agentes le alcanzaron. Dio 0,94 de tasa de alcohol, casi cuatro veces más de lo permitido, y también dio resultado positivo a la prueba de drogas por haber consumido previamente cannabis, según la acusación pública.

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