Un incendio en la albufera de Alcúdia provocó ayer la alarma por su cercanía a las viviendas diseminadas por esta zona y obligó a desalojar a diez familias, además de caballos y perros. Sin embargo, la rápida actuación de los Bombers de Mallorca y los efectivos del Ibanat permitieron estabilizarlo en unas tres horas, aunque finalmente se quemaron 18 hectáreas de cañizal en un área próxima al Parque Natural. En ningún momento las llamas entraron en la zona protegida, según informó la conselleria de Medio Ambiente.

Minutos antes de las 15 horas, el servicio de emergencias del 112 recibió el aviso de un fuego en la zona de Can Comandant, junto a la carretera de es Murterar, y de inmediato se informó al Institut Balear de la Natura (Ibanat), ya que se trataba de un incendio de carácter forestal.

En cuanto a los medios aéreos, en un principio se movilizaron dos aviones, otro de coordinación y tres helicópteros pero se sumó al dispositivo un Canadair para tratar de ser más efectivos ante la cercanía de diversas viviendas, lo que obligó a activar el nivel 1 de emergencia. Por tierra actuaron una brigada, una autobomba y un capataz por parte del Ibanat. Por parte de Bombers de Mallorca, acudieron los efectivos del parque de Inca y Alcúdia. Intervinieron además la Policía Local de sa Pobla y Protección Civil, y los agentes tuvieron que cortar la carretera de la albufera.

A las 17,50 horas, el fuego se dio por estabilizado y el Ibanat bajó de nuevo la alarma a nivel 0, debido a que las viviendas ya no corrían peligro de incendiarse. Sin embargo, no controlaron por completo el incendio hasta las 19 horas, cuando la conselleria de Medio Ambiente informó de que habían ardido 18,7 hectáreas de cañizar en la zona conocida como Can Comandant.