La juez ha decidido mantener en prisión preventiva a la turista francesa que arrolló mortalmente a un ciclista, agente de la Policía Local de Palma, cuando conducía ebria en Sineu. La magistrada considera que existe riesgo de fuga por la gravedad de los hechos y el nulo arraigo de la acusada en la isla, rechazando así los argumentos de su defensa para dejarla en libertad.

En un auto dictado anteayer, la titular del juzgado de instrucción número 2 de Inca considera que se dan todos los requisitos exigidos por la ley para mantener en prisión a la sospechosa. En primer lugar, porque los delitos que se le imputan, homicidio imprudente y contra la seguridad del tráfico, pueden acarrear penas superiores a los dos años. Además, existen indicios suficientes para considerar a la acusada autora de estos delitos, ya que admitió que había consumido alcohol antes de arrollar a la víctima y la tasa era cuatro veces superior al máximo permitido. Finalmente, la juez concluye que sigue existiendo riesgo de fuga por la gravedad de la pena que se le puede imponer. La mujer "no posee ningún arraigo en la isla ni nada que la retenga, sino que toda su vida discurre en Francia", argumenta.

El abogado defensor rebatió este argumento al recurrir el ingreso en prisión provisional de la acusada, alegando que su suegra y la familia de su pareja residen habitualmente en la isla desde hace 40 años, en un domicilio que han puesto a su disposición para que permanezca hasta el juicio. Además, aseguraba que la sospechosa está muy arrepentida y conmocionada y que sus familiares están intentado reunir la mayor cantidad de dinero posible para hacer frente a la reparación del daño. La magistrada ha rechazado ahora este alegato para mantener presa a la acusada.

Los hechos ocurrieron el 14 de septiembre, cuando la mujer arrolló mortalmente con un coche a Biel Llull, policía local de Palma que circulaba en bicicleta junto a su hijo de 8 años cerca de Sineu.