Un trabajador de 61 años falleció ayer en un accidente laboral, al caer desde una escalera en la que reparaba un tendido eléctrico en una finca del término municipal de Son Servera. La Guardia Civil abrió una investigación para determinar las circunstancias del fallecimiento, si bien todos los indicios apuntaban a que se trató de un accidente laboral. El hombre habría muerto a consecuencia de la caída, desde unos tres metros de altura, o bien tras recibir una descarga mientras manipulaba un cableado eléctrico.

La víctima, identificado como Miquel Q., era vecino de Son Servera y tenía una pequeña empresa de trabajos de electricidad en Cala Bona. Al parecer le habían encargado que revisara el tendido eléctrico de una finca situada fora vila, junto a la carretera de Son Servera a Capdepera, en el Camí de ses Rumias de Pula.

Según informaron fuentes del Ayuntamiento de Son Servera, sobre la una del mediodía de ayer, el propietario de la finca acudió al lugar, para ver como estaban los trabajos, y encontró al hombre tendido en el suelo, a los pies de una escalera, ya sin vida.

El dueño de la finca alertó de inmediato a los servicios de emergencia, y rápidamente se desplazaron al lugar una dotación sanitaria, así como agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil.

Los sanitarios confirmaron que el hombre estaba fallecido, aparentemente desde hacía varias horas. Agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Manacor se hicieron cargo de las diligencias, si bien todos los indicios recogidos en el lugar apuntaba a que se trataba de un accidente laboral.

El cadáver estaba a los pies de una escalera de unos tres metros de altura. La hipótesis que se manejaba ayer era que la víctima había caído accidentalmente de la escalera y se había golpeado en la cabeza, por lo que habría fallecido prácticamente en el acto. No se descartaba que el trabajador hubiera recibido previamente una descarga eléctrica mientras manipulaba el cableado que tenía que reparar.

Los investigadores de la Guardia Civil realizaron una detenida inspección ocular en el lugar del siniestro, y a media tarde de ayer el juzgado de guardia de guardia de Manacor autorizó el levantamiento del cadáver. Estaba previsto que hoy se le practique la autopsia, lo que permitirá determinar de forma fehaciente las causas del fallecimiento.