"Estaba sola en el estanco y de pronto notó que la cogían del brazo. Ella intentó soltarse, se cayó al suelo y el atracador empezó a darle golpes en la cabeza con la pistola". La hija de la mujer de 58 años que el pasado domingo sufrió un violento asalto en un estanco de las Avenidas de Palma explicaba así lo ocurrido mientras intentaba reponerse del susto. La víctima continuaba ingresada en una clínica de la ciudad, fuera de peligro pero con 18 grapas en la cabeza por los golpes recibidos. La Policía Nacional continuaba realizando gestiones para localizar y detener al delincuente.

"Acababa de abrir el estanco. Estaba sola porque era domingo y el atracador la pilló por sorpresa. Notó que alguien la cogía del brazo y al ver que era un hombre con una pistola intentó soltarse y se cayó al suelo", explicaba la hija de la víctima. "Eso le trastocó los planes. La cogió desde el otro lado del mostrador y empezó a darle golpes en la cabeza con la pistola. Luego se fue corriendo sin llevarse nada", afirmaba.

La propia víctima pudo pedir auxilio a un allegado, que la encontró tumbada en el suelo y llena de sangre. La mujer fue trasladada a una clínica de Palma con un traumatismo craneoencefálico y los médicos le aplicaron 18 grapas para cerrar las heridas sufridas. "Está bien, pero sigue un poco aturdida", comentaba su hija.

Los investigadores del grupo de Atracos siguen recabando pistas para dar con él autor del asalto, que fue grabado por las cámaras de seguridad del local.