Dos hombres murieron ayer ahogados en una aciaga jornada en las playas de Mallorca. El primero falleció cuando nadaba en ses Covetes, en Campos, la otra víctima murió cuando se bañaba en Can Pere Antoni, en Palma.

La primera de las víctimas, de 43 años, falleció sobre la una y cuarto de la madrugada cuando se bañaba en la playa de ses Covetes, en el término municipal de Campos. Al parecer, ante la tardanza, su pareja alertó de que no había salido del agua después de 20 minutos desde que hubiera salido a nadar.

Los peores presagios se cumplieron. Un bañista fue en su busca y, al cabo de un rato, se encontró a la víctima flotando en el mar y lo sacó hasta la orilla. El hombre no reaccionó.

Una vez en la arena, se le practicaron numerosas maniobras de reanimación cardiopulmonar al bañista. El médico del PAC de Campos que se había desplazado hasta el lugar no pudo hacer nada por su vida y certificó su defunción.

Agentes de la Guardia Civil acudieron a la playa de ses Covetes para investigar las circunstancias que rodearon la muerte del bañista. A continuación, los operarios de los servicios funerarios trasladaron el cadáver hasta el Instituto Anatómico Forense de Palma para que le fuera practicada la autopsia.

Apenas unas horas más tarde, sobre las once y media de la mañana, otro bañista, en esta ocasión un hombre de 71 años, falleció cuando se bañaba en la playa de Can Pere Antoni, de Palma. La víctima se encontraba flotando en el agua inconsciente.

Los socorristas sacaron al bañista hasta la arena, donde le realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar. La víctima no respondió a los estímulos.

A continuación, las asistencias sanitarias del Ib-salut acudieron a la playa de Can Pere Antoni a bordo de una UVI móvil. El personal sanitario realizó a la víctima maniobras avanzadas de resucitación cardiopulmonar. El bañista no reaccionó y certificaron su defunción.

Efectivos de la Policía Local y la Policía Nacional acudieron a la playa hasta que el juez de guardia se encargó de ordenar el levantamiento del cadáver.