Con el apoyo de coches nodriza que les almacenaban la mercancía, una serie de individuos habían reconvertido la primera línea de la Playa de Palma en su supermercado particular. La banda estaba especializada en la venta irregular de madrugada de latas de cerveza a turistas. La Policía Local estableció un dispositivo especial nocturno para atajar esta infracción administrativa.

Los denominados ´lateros´ se habían puesto en el punto de mira en las últimas semanas después de su frenética actividad para lucrarse en la calle gracias a la masificación de la Playa de Palma. Algunos de ellos tenían tal sensación de impunidad que no vacilaban en pasearse por los Balnearios con un carrito de la compra repleto de latas de cerveza para vendérsela a los miles de turistas con los que se topaban.

En las últimas semanas, el Observatorio de la Playa de Palma, creado este año para analizar en detalle todos los problemas cotidianos que surgen en este concurrido núcleo turístico, había detectado un incremento sustancial de esta práctica irregular.

Sobre las nueve de la noche del pasado martes, un importante despliegue de efectivos de la Policía Local se movilizó entre los principales balnearios. Su objetivo: la caza del ´latero´. El dispositivo especial se prolongó cinco horas hasta las dos de la madrugada.

Los agentes no tuvieron que esperar mucho para detectar un gran número de infracciones administrativas una vez que se había echado la noche en la Playa de Palma. Algunos supermercados habían superado con creces la hora máxima, fijada para la medianoche, para la venta de alcohol. Estos comercios aprovechaban la afluencia de turistas de madrugada para hacer negocio, pese a que el establecimiento no contaban con licencia para expender bebidas alcohólicas a esas horas.

No obstante, la infracción que acaparó una mayor atención de los agentes de la Policía Local fue la que cometían los ´lateros´. Algunos de ellos trataban de actuar a hurtadillas para evitar ser detectados. Otros, en cambio, vendían las latas de cerveza a los viandantes con absoluto descaro como si de cualquier otro comercio regulado se tratara.

Además, una parte importante del operativo nocturno en la Playa de Palma se centró en determinar con exactitud el ´modus operandi´ de estos individuos para reponer la mercancía, una vez que la habían agotado y volver rápidamente a la calle a proseguir la venta.

Los agentes detectaron en las inmediaciones de la primera línea de la Playa de Palma la presencia de dos vehículos estacionados en la zona. Ambos estaban repletos de latas de cerveza y se encargaban de suministrárselas a los vendedores, que recurrían a ellas con asiduidad.

Como consecuencia del operativo especial, la Policía Local impuso 15 denuncias a estos ´lateros´ sorprendidos ´In fraganti´. La mayoría de ellos son de nacionalidad búlgara, rumana o paquistaní. Durante la noche intervinieron 500 latas de cerveza que iban a ser vendidas irregularmente y se incoaron ocho actas a los supermercados que vendían alcohol de madrugada.