La menor cuyo padre fue juzgado ayer por agredirla sexualmente durante cinco años entre 1999 y 2004 en Menorca fue abusada también presuntamente por otro familiar, un tío, y años después por el compañero sentimental de la madre. La psicóloga que exploró a la afectada recalcó que los principales hechos tuvieron que ver con su progenitor y con su tío, ya fallecido. El padre abusaba de ella diariamente, según su versión. "Utilizaba cuerdas para atarla que guardaba debajo de la cama", detalló la especialista. La perjudicada, como consecuencia de estos hechos, sufrió secuelas como estrés postraumático, trastorno de ansiedad, trastorno de alimentación y trastorno de sueño. El fiscal apuntó que era abusada empleando la violencia física (golpes) o psíquica, con intimidaciones y amenazas, ya que el padre presuntamente la amedrentaba diciéndole que si lo contaba, la mataría a palos. La psicóloga explicó que los abusos que sufrió por parte de una tercera persona, la pareja de su madre, fueron ya posteriores. La progenitora ayer manifestó que su anterior compañero sentimental fue condenado a seis años de cárcel por estos abusos a su hija.