Dos guardias civiles también han sido detenidos por su presunta implicación con las organizaciones de narcotraficantes. Los agentes se encontraban de baja en el Cuerpo y ya habían sido arrestados por tráfico de sustancias anabolizantes y de drogas en otras operaciones.

La detención de estos dos agentes del Instituto Armado se efectuó a última hora del sábado, cuando los investigadores ultimaban las pesquisas después de interrogar a los 40 arrestados en la redada.

A partir de las cuatro y media de la tarde, una veintena de los cuarenta presuntos narcotraficantes detenidos en el transcurso de la espectacular 'Operación Iron Belt' fueron puestos a disposición judicial.

Los primeros ocho descendieron la famosa rampa de los juzgados, en la calle Parellades, para prestar declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, el juez José Castro, que ayer se encontraba en funciones de guardia. El representante del Ministerio Público era el fiscal anticorrupción Juan Carrau.

Todos estos detenidos fueron conducidos en coche o en el furgón y se cubrieron el rostro con camisetas para evitar ser reconocidos. Otros se limitaron a agacharse y dar la espalda para evitar que su imagen pudiera ser captada.

Al cabo de una media hora, un autobús del Instituto Armado se detuvo frente a la puerta principal de los Juzgados de Vía Alemania, que se abrieron para la ocasión.

La llegada de 'La Eva', la histórica narcotraficante de cocaína de Son Banya, fue diametralmente opuesta. Fue recibida con vítores por parte de sus allegados, concentrados en las calles adyacentes.

Lejos de ocultar su rostro, 'La Eva' se pavoneó en el breve trayecto que la separaba del autobús de la entrada principal de los Juzgados. Por si quedaba alguna duda de quién era, ella misma se identificó ante la prensa. "¡Aquí viene 'La Eva', la más guapa!", presumió mientras agitaba su cuidada cabellera azabache.

En cambio, los miembros del clan de 'Los Benabad' mantuvieron una actitud mucho más discreta antes de comparecer ante el juez. Los calabozos de los juzgados se llenaron al máximo de su capacidad.

Estos dos clanes de narcotraficantes habían tomado el relevo de 'La Paca' en el poblado y mantenían una estrecha relación entre ellos. De hecho, habían conseguido algo impensable en el conflictivo asentamiento hasta hace bien poco tiempo: internacionalizar la organización.

La unión de estos dos clanes y ampliar las conexiones a la Península y a los Países Bajos les había permitido amasar una considerable fortuna.

Elevado tren de vida

La droga conseguían introducirla en Mallorca perfectamente camuflada en dobles fondos de los coches procedentes de Holanda. No obstante, la discreción no era su fuerte. El elevado tren de vida que llevaban y los deslumbrantes vehículos de alta gama que conducían, sin tener ningún oficio legal conocido, dejaba a las claras su actividad ilícita.

La 'Operación Iron Belt' se había iniciado hace 17 meses, pero la fecha de la culminación de la fase final se eligió meticulosamente. Los investigadores averiguaron que los clanes habían adquirido una importante cantidad de droga para darle salida en la temporada estival.