Caso Abierto - Diario de Mallorca

Caso Abierto - Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Tribunales

2 años por arrollar a una niña en un paso de peatones en Inca y huir

El joven se dio a la fuga dejando a la víctima en coma

Paso de peatones de la avenida de Alcúdia de Inca, en el número 132, en el que se produjo el grave atropello a la menor en julio de 2011.

Un juzgado de Palma ha condenado a dos años de prisión a un joven por un delito de conducción temeraria y otro de omisión del deber de socorro por haber arrollado con un coche a una niña de once años en un paso de peatones de Inca cuando circulaba a una velocidad muy superior a la permitida por un tramo urbano y luego haberse dado a la fuga dejando a la víctima crítica en julio de 2011. La menor sufrió heridas gravísimas tras ser atropellada e impactar en dos ocasiones con el vehículo. Fue evacuada urgentemente al hospital de Son Espases. Requirió respiración asistida y tuvo que estar en coma inducido por un severo traumatismo craneoencefálico y una hemorragia interna cerebral. Tras permanecer en la UCI, se recuperó, pero le han quedado secuelas como un bultoma en la clavícula, una cicatriz, déficit de agudeza visual y una menor elevación de un párpado. Como consecuencia del atropello, la conselleria de Salud del Govern le reconoció una discapacidad del 35 por ciento.

El magistrado también ha impuesto al sospechoso, de 29 años y natural de Marruecos, la privación del derecho a conducir vehículos a motor durante tres años y siete meses, lo que comporta la pérdida de vigencia del carné, y una indemnización de 19.000 euros a la perjudicada por las lesiones y secuelas causadas.

Según se declara probado en la sentencia, que aún no es firme, los hechos ocurrieron sobre las diez de la noche del pasado 8 de julio de 2011, cuando el acusado conducía por la avenida de Alcúdia de Inca un turismo Toyota Yaris, propiedad de un amigo, por un tramo recto, de doble sentido, con buena visibilidad y escasa circulación. El joven, que entonces tenía 24 años, circulaba a una velocidad "muy superior" a la permitida para vía urbana de 50 kilómetros por hora, en dirección al centro de la ciudad, e infringió con ello "las normas más básicas de circulación". Así, a la altura del número 132 de la avenida de Alcúdia, no respetó el paso de peatones debidamente señalizado con señales horizontales y verticales, iluminado con dos farolas, y embistió a toda velocidad a una niña de once años que en ese momento cruzaba por allí, junto con sus dos hermanos.

La víctima recibió un primer impacto con el frontal del coche, llegando a romperse el soporte de la matrícula. Su cuerpo salió despedido y de nuevo sufrió un segundo golpe directo con la cabeza contra la base del parabrisas. Entonces, la menor salió proyectada por los aires a una distancia de unos 21 metros y cayó inconsciente en el suelo. Todo ello fue observado por el acusado, quien huyó del lugar a toda velocidad sin cerciorarse del estado de la niña y de si era atendida por terceras personas. En el momento de su fuga, la perjudicada se hallaba tumbada boca abajo, sobre el asfalto, sin ser atendida por nadie.

La menor sufrió lesiones de extrema gravedad y quedó en coma inducido en la UCI del hospital. Precisó 220 días para curar de sus heridas y arrastra secuelas. El Govern en 2012 le reconoció una discapacidad del 35%.

El magistrado concluye que el acusado condujo con una temeridad manifiesta poniendo en peligro la vida de los viandantes. Era tal su descuido que ni se percató de que pasaban peatones por el paso. Con los datos disponibles, el juez detalla que el joven circulaba a unos 80 kilómetros por hora y destaca que los hechos son muy graves.

Compartir el artículo

stats