Los ladridos de los perros alertaron a primera hora de la mañana a Salvadora de que algo malo estaba pasando. Unos diez minutos más tarde, su vecina pidió ayuda a gritos.

"¡Socorro, auxilio, ayúdenme!", clamó la víctima. La vecina salió de su domicilio y acudió en su ayuda sin acertar a saber qué ocurría. "Ella salió a la calle. Tenía la cara negra, pero yo pensaba que era por el humo. No le vi el cuerpo".

La residente intentó rociar agua al incendio con la manguera. Aunque pronto comprobó que no tenía presión suficiente para alcanzar la vivienda contigua. "No le había visto a él, pero salió gritando con una lata de cerveza. La mujer cogió a su hijo, lo metió en el coche y huyó con él. Antes me dijo que llamara a la Policía".

Salvadora se percató de que algo muy extraño ocurría y llamó a la Policía Local. También avisó a emergencias. Varios coches patrulla acudieron al lugar rápidamente y dotaciones de Bombers de Mallorca. "Él se tiró delante de un coche y le apartaron", subrayó.

La pareja hacía apenas dos años que se había instalado en esa casa y no se había hecho notar en el vecindario. "Hace unas semanas vinieron a mi casa con el niño y les regalé un gatito negro. Parecían una pareja normal. Ella era muy maja", indicó la hija de Salvadora.

Este brutal caso de violencia de género causó una profunda conmoción. El Ayuntamiento de Alcúdia expresó su condena hacia este caso y convocó una concentración para hoy a las doce del mediodía delante del consistorio municipal.

El Govern, por su parte, anunció que se personará como acusación particular en la causa que se derive de este caso de violencia de género. Al mismo tiempo, expresó su condena y rechazo "más contundentes" por esta brutal agresión machista.