La organización de narcotraficantes hispanomarroquí se había establecido en el Llevant de Mallorca, aunque tenía una pequeña delegación en Palma. La Guardia Civil detuvo a 19 personas el martes en el transcurso de 17 registros donde se intervinieron diversos tipos de drogas, armas reales y simuladas y 78.000 euros en efectivo.

La investigación partió de agentes de la Policía Judicial del Instituto Armado de Manacor. Los expertos detectaron la existencia de una organización compuesta por españoles y marroquíes que se dedicaba al tráfico de sustancias estupefacientes. Su ámbito de actuación se centraba en la Part Forana de la isla. En concreto, en la capital del Llevant, Sant Llorenç des Cardassar, Son Servera y Artà. Aunque una ramificación se había extendido a Palma. En concreto, al Polígono Son Castelló.

Tras numerosas pesquisas, a primera hora de la mañana del martes -sobre las seis y media-, se activó la fase de explotación de la denominada 'Operación Formosa'. Un centenar de agentes de la Guardia Civil se movilizaron a diversos puntos de la isla. Durante la actuación se practicaron 17 registros y se desarticularon ocho activos puntos de venta de droga en la zona del Llevant.

Competencias delimitadas

Cada miembro de la organización tenía delimitadas sus competencias de antemano. Así, los narcotraficantes marroquíes se dedicaban a la introducción de la droga en la isla. Mientras, los españoles se encargaban de su distribución al menudeo en diferentes locales de ocio de Mallorca y en los puntos de venta establecidos.

Efectivos de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic) de la Guardia Civil, provistos del correspondiente ariete, se encargaron de derribar la puerta de los inmuebles y abrirse paso al interior. La sorpresiva irrupción de los agentes mientras los sospechosos se encontraban durmiendo impidió cualquier atisbo de resistencia o de intento de fuga.

Los agentes intervinieron allí 2,5 kilos de cocaína, cuatro kilos de cristal, 200 plantas de marihuana (dos kilos y medio de cogollos), 300 gramos de speed, 2,5 kilos de sustancia de corte, y 2,3 kilos de otra desconocida.

Asimismo, los efectivos se incautaron de una escopeta de cañones recortados y un arco con sus correspondientes flechas. También se toparon con pistolas, un fusil, una carabina simuladas, con munición de fogueo, y un arma utilizada para el 'paintball'. Durante los registros confiscaron 11 vehículos y 78.000 euros en efectivo.

En el operativo también participaron helicópteros y los guías caninos de la Unidad Cinológica con sus perros adiestrados para olfatear la droga y el dinero.

Con esta actuación, unida a otras anteriores en Llucmajor, la Guardia Civil considera que se reduce la inseguridad ciudadana en la Part Forana. Además de combatir el tráfico de drogas, se impide que se cometan más robos con los que delincuentes tratan de comprar los estupefacientes.