La fiscalía solicita 25 años de prisión para un hombre acusado de matar de diez puñaladas a un joven en un domicilio de Campos en 2014. El ministerio público considera al procesado autor de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, ya que primero derribó a la víctima propinándole un botellazo en la cabeza y dejándola sin posibilidad de defensa y la acuchilló para matarla de forma dolorosa. El sospechoso alegó tras su detención que el joven le chantajeaba con difundir unos vídeos sexuales. Está previsto que un tribunal popular enjuicie el caso a partir del próximo lunes en la Audiencia Provincial.

Los hechos, según el relato del ministerio público, ocurrieron hacia las nueve de la mañana del 2 de mayo de 2014. El acusado, Marcos F.P., de 52 años, se dirigió a su domicilio en la calle Nicolau Oliver Fullana, en Campos, junto a Rafel Gaspar Miralles Vich, de 22. Ya en la vivienda, ambos se enzarzaron en una discusión hasta que el hombre golpeó a la víctima con una botella de cristal en la cabeza. El joven cayó al suelo y quedó tumbado y sin ninguna posibilidad de defenderse, según el fiscal. El acusado se dirigió entonces a la cocina, cogió un cuchillo de cocina y se lo clavó en el pecho a Rafel Miralles. Acto seguido, le asestó otras nueve cuchilladas en la espalda, en la zona escapular, con intención de acabar con su vida de forma dolorosa. Una de las puñaladas le causó un shock hipovolémico y el joven murió allí mismo.

La fiscalía considera que estos hechos constituyen un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, por el que reclama 25 años de prisión. Además, solicita que indemnice a los padres de la víctima con 200.000 euros.

Alegó que le chantajeaba

El sospechoso fue detenido en la escena del crimen. Según explicó tras su arresto, Miralles le amenazaba desde hacía ocho meses para que le diera dinero. En su declaración, aseguró que le amedrentaba para que le pagara por una maleta perdida. La noche anterior al crimen, ambos habrían estado consumiendo cocaína y alcohol y el joven aprovechó para hacerle fotos desnudo. Luego, le chantajeó con difundir estas imágenes si no le pagaba.

Marcos F.P. admitió la autoría del crimen y explicó que la discusión con la víctima se originó porque Miralles quería que le donara todas sus joyas ante notario. El hombre se negó y, siempre según su versión, el joven le amenazó con publicar en Facebook las fotografías sexuales tomadas esa noche.

Está previsto que el acusado, que permanece en prisión preventiva desde el día que ocurrieron los hechos, será juzgado a partir del próximo lunes por un tribunal popular en la Audiencia Provincial de Palma.