­El 061 atendió a las 17 personas que resultaron intoxicadas leves en el incendio de un transformador soterrado bajo una de las terrazas de la Marina, en la medianoche del viernes. Entre los afectados hubo dos agentes de la Policía Portuaria y otro más de la Policía Local de Vila, que ordenó el desalojo de la terraza de los tres negocios que dan a la plaza de la confluencia de la calle Cipriano Garijo con la calle Vicente Soler.

El humo se detectó saliendo por debajo del entarimado de madera de la terraza de uno de los locales en torno a las once de la noche, cuando había decenas de clientes en la plaza. Al apreciar que se estaba produciendo la combustión de material plástico -la humareda era de color blanco-, los agentes de la Policía Local desplazados al lugar optaron por establecer un perímetro de seguridad y desalojaron los negocios mientras llegaban los bomberos del Parque Insular.

Al llegar a la zona, en torno a las 23.20, los bomberos escucharon varias explosiones de origen eléctrico en la caseta soterrada, por lo que esperaron a que estas se dejaran de producir. Mientras, retiraron el mobiliario de la terraza y abrieron la compuerta de acceso a los transformadores para ventilar el subterráneo. Al acceder al interior detectaron un conato de fuego, por lo que rociaron con un extintor de dióxido de carbono las llamas hasta sofocarlas. Una vez ventilada la estancia, los operarios de Endesa se hicieron cargo de la incidencia para reparar los daños a la red de baja tensión.

El 061 desplazó dos ambulancias a la zona para atender a los intoxicados por inhalación de humos, aunque ninguno de ellos requirió ser trasladado al hospital. Fuentes de la compañía eléctrica no pudieron precisar las causas de las llamas, aunque aseguran que se trata de una avería que "se puede dar" en este tipo de instalación. Por ello consideran que el origen resulta "incierto". 241 abonados se quedaron sin suministro.