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Mercado negro

Desmantelada una fábrica clandestina de tabaco en Son Servera

Detenidos al menos dos miembros de una red que empaquetaba y distribuía el producto

Dos agentes de Aduanas de la Agencia Tributaria precintan cajas con el material intervenido, ayer en Son Servera.

La Agencia Tributaria ha desmantelado una fábrica clandestina de tabaco en Son Servera. Los agentes llevaron a cabo ayer registros en un local del municipio donde se procesaba y empaquetaba el producto para luego distribuirlo en el mercado negro y en un domicilio de Cala Bona, donde fueron arrestadas al menos dos personas. Los investigadores se incautaron de una importante cantidad de tabaco y otros efectos y mantenían abierta la operación, por lo que podrían producirse más detenciones.

El dispositivo es fruto de varias semanas de pesquisas llevadas a cabo por Vigilancia Aduanera, dependiente de la Agencia Tributaria, explicaron fuentes conocedoras del caso. Los investigadores habían detectado que en la zona se estaba distribuyendo tabaco de forma clandestina. La investigación permitió estrechar el cerco y llevó a los agentes hasta un local comercial cerrado de la calle Joana Roca, en Son Servera, en el que irrumpieron ayer por la mañana.

Los agentes comprobaron que en el establecimiento se había instalado una fábrica de tabaco de contrabando. Según pudieron comprobar, allí se recibían grandes cantidades de producto, que era procesado y empaquetado en el local para darle salida después en el mercado negro. Los investigadores de la Agencia Tributaria intervinieron, además del tabaco, material para manipularlo y distribuirlo en cajetillas.

A lo largo de la mañana se llevó a cabo otro registro en un domicilio del núcleo de Cala Bona, en el mismo término municipal, vinculado al parecer con la red de contrabandistas. Los agentes practicaron al menos otra inspección en la misma zona.

Según la investigación, la fábrica clandestina desmantelada ayer llevaba operando varios meses y estaba aumentando su producción con vistas a la temporada turística, añadieron las mismas fuentes. Al parecer, los responsables de la factoría ilegal recibían abundantes partidas de tabaco a granel procedentes de fuera de la isla que luego procesaban, empaquetaban y vendían, por precios bastante más bajos que los de los canales legales, ya que evitaban el alto porcentaje de impuestos que grava este tipo de producto.

Los funcionarios de la Agencia Tributaria encargados de las pesquisas seguían ayer por la tarde realizando gestiones para desmantelar completamente el entramado y analizaban el abundante material intervenido durante la operación contra el contrabando de tabaco.

Los agentes no descartaban llevar a cabo nuevos registros y practicar nuevas detenciones relacionadas con esta investigación.

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