­La Guardia Civil de Menorca ha intervenido varias cajas con un juego infantil que contenían crías de un crustáceo, denominado triops longicaudatus, considerado una especie invasora. Se vendían como juegos educativos para experimentar la incubación y crecimiento de este crustáceo, cuya importación está prohibida al representar un peligro para la fauna autóctona.