La niña de dos años que se precipitó el pasado lunes a primeras horas de la tarde desde la ventana de un primer piso en Consell continuaba ayer en estado muy grave en el hospital de Son Espases. La menor ingresó crítica en el centro hospitalario palmesano de referencia tras haber caído de unos seis metros de altura. Ayer permanecía en la UCI pediátrica de Son Espases y su estado de salud era muy delicado.

La Guardia Civil prosigue con las pesquisas. Los investigadores consideran el caso como un accidente. Según las primeras indagaciones, se trató de una caída fortuita. Los agentes en un principio no van imputar ningún delito a los padres, si bien están a la espera de que el juez se pronuncie por si ordena practicar alguna diligencia más.

La Guardia Civil continúa con las gestiones y aún tiene que tomar declaración a varios testigos, entre ellos, a la madre de la víctima, para conocer su versión de los hechos. Según las primeras averiguaciones, la niña de dos años estaba en un dormitorio de la casa, se subió a una cama y desde allí abrió la ventana y se precipitó a la calle desde el primer piso. El impacto fue tremendo y sufrió gravísimas lesiones.