La Audiencia de Palma ha absuelto al exgerente del Club Náutico Cala Gamba, que ejerció sus funciones entre 1997 y 2008, de los delitos de estafa y falsedad documental de los que fue acusado por intermediar en numerosos contratos de compraventa de derechos de amarre al considerar que no ha quedado acreditado que haya causado ningún perjuicio.

El tribunal detalla que la actuación del imputado, defendido por el letrado Eduardo Morey, no provocó ningún perjuicio. Según se declara probado, el antiguo gerente en ciertas ocasiones simulaba la firma de alguno de los intervinientes en el contrato de compraventa de derechos de amarre y recibía en todo caso el dinero que los compradores se obligaban a entregar en cumplimiento de dichos contratos. Estos compradores han disfrutado sin problema y en todo momento de su derecho de amarre, por el que el club a su vez facturaba la cuota correspondiente. Además, la sala destaca que no hay prueba suficiente del perjuicio causado al club náutico. Ni tampoco del destino de las cantidades que recibió el sospechoso, unos 100.000 euros. El tribunal subraya que no ha contado con la contabilidad ni las actas. Ante la falta de la documentación y esas pruebas y las dudas surgidas, la sala le absuelve.