La noche de fiesta acabó en llamas. Un juzgado de Palma ha condenado a un camarero de un pub de s'Arenal a una pena de multa por quemar con absenta a dos turistas alemanes cuando flambeaba la bebida con un mechero en la barra del local en el verano de 2011. Los dos clientes resultaron alcanzados por el fuego de forma accidental y sufrieron quemaduras de segundo grado en cara, cuello, tronco y brazo. Ambos tardaron más de cien días en curar de las aparatosas lesiones, precisaron tratamiento médico e incluso intervenciones quirúrgicas y les ha quedado como secuela un perjuicio estético ligero. Uno de ellos permaneció 13 días hospitalizado.

El trabajador del bar de la Playa de Palma acusado ayer reconoció los hechos ante la sala. La magistrada le impuso una pena de multa de doce meses a razón de tres euros diarios por lesiones por imprudencia. En concepto de responsabilidad civil, la juez fijó una indemnización de más de 6.000 euros para cada uno de los germanos perjudicados por las quemaduras y secuelas sufridas.

Los hechos se remontan al verano de 2011 en un local de copas situado en la calle Cartago de s'Arenal en el que trabajaba como camarero el imputado, de 42 años y de origen venezolano. Sobre las tres y media de la madrugada del pasado 30 de agosto de 2011, el sospechoso preparaba en la barra del establecimiento tres consumiciones de absenta a las que prendió fuego con un mechero.

Posteriormente, eludiendo las más elementales medidas de precaución, según la fiscalía, el camarero arrojó un chorro de esa bebida, que posee una graduación del 80 por ciento de alcohol, en dirección a las llamas. De esta manera, alcanzó en su trayectoria de forma accidental a un cliente alemán, que sufrió quemaduras de segundo grado en rostro, cuello, tronco y brazo derecho. El turista tardó 101 días en curar, 13 estuvo hospitalizado y 28 impedido. Precisó tratamiento médico y quirúrgico con diversas curas e inmovilizaciones y le ha quedado como secuela un perjuicio estético ligero.

Otra mujer germana también resultó afectada por el fuego que se extendió por la absenta. Sufrió quemaduras de segundo grado en cara, escote, tórax izquierdo y mano derecha. Tardó 108 días en sanar de estas lesiones, de los cuales 24 estuvo impedida para sus ocupaciones habituales. Fue tratada en consulta de cirugía plástica y también sufre secuelas.