Un acusado aceptó ayer en la Audiencia de Palma una pena de cuatro años de prisión por violar a un menor de quince años, discapacitado psíquico, en una localidad de la zona de Llevant de la isla en octubre de 2012. El sospechoso, español de 41 años, ayer confesó los hechos ante el tribunal de la sección primera. El hombre se declaró autor de un delito de abuso sexual. "Estoy arrepentido, son ciertos los hechos. Es verdad que lo hice", aseguró en el turno de la última palabra.
Además de conformarse con la condena de cuatro años de cárcel, el procesado también se mostró de acuerdo con la prohibición de aproximarse y comunicarse con la víctima por un periodo de diez años. El fiscal retiró su petición de indemnización al final del juicio por los daños psicológicos producidos después de que el padre del perjudicado renunciara a la compensación.
El joven abusado ayer prestó declaración ante la sala protegido por un biombo y acompañado por una psicóloga. "Lo que conté era cierto", afirmó la víctima. "Él me dijo que no dijera nada a mis padres de lo ocurrido", añadió.
La víctima padece una discapacidad del 70 por ciento en base a una hemiplejia, pérdida neurosensorial de oído, epilepsia y retraso mental, según la acusación. Su progenitor detalló que, al enterarse de lo sucedido, denunciaron los hechos ante la Guardia Civil, que inició las pesquisas.
El imputado, que es vecino del perjudicado, ya que ambos residen en el mismo pueblo, ayer admitió los cargos ante el tribunal e insistió en su arrepentimiento. Los hechos enjuiciados se remontan al pasado 8 de octubre de 2012, sobre las ocho de la tarde, cuando el acusado se encontró con el menor en una plaza de la localidad. En esas fechas, la víctima contaba con 15 años.
Según la versión del ministerio fiscal, el procesado, con ánimo libidinoso y con conocimiento de que el niño padece una discapacidad psíquica, lo llevó a un lugar apartado y le pidió que se desnudara. Acto seguido, le practicó una felación y solicitó al perjudicado que lo hiciera también. Además, le penetró y de nuevo le pidió al menor que lo hiciera también. Ayer al mediodía, la fiscalía y el abogado defensor alcanzaron un acuerdo y el letrado se adhirió a las conclusiones del ministerio público por un delito de abusos.
