Un delincuente fue detenido ayer de madrugada después de que desplegara una actividad delictiva frenética. En apenas unos minutos robo en dos comercios de Palma y sustrajo un vehículo estacionado en la calle. La Policía le detuvo poco después, cuando el ladrón acudió a Son Banya a comprar droga.
El primero de los golpes lo perpetró sobre las 0.50 horas en una peluquería de la calle Jaume Balmes de Palma. El delincuente rompió un cristal e hizo saltar la alarma.
Una patrulla de la Policía Nacional se personó en el lugar. El cajetín de la caja registradora había desaparecido. Al poco tiempo, la alarma de un comercio de la calle Eusebio Estada empezó a sonar. El 'modus operandi' era muy similar al utilizado.
De repente un coche arrancó. Los policías le dieron el alto, pero el conductor aceleró bruscamente y se dio a la fuga. Los agentes llamaron al titular del vehículo, que se percató de que se lo acababan de robar.
El coche fue localizado poco después en Son Banya. Su conductor negó haberse puesto al volante. Sin embargo, la huella de su zapatilla coincidía perfectamente con la hallada en la peluquería desvalijada. Fue detenido por los robos con fuerza y el hurto del vehículo.
