La Policía Local de Palma detuvo ayer de madrugada a un hombre de 33 años que propinó un puñetazo en la cara a su madre ante varios agentes. La víctima aseguró que no era la primera agresión sufrida a manos de su hijo y pidió que no lo arrestaran. Tuvo que ser atendida por efectivos sanitarios de las lesiones sufridas en la boca.
Los hechos ocurrieron hacia las dos y cuarto de la mañana en un edificio de la calle Pico Teide, en Son Gotleu. Varias llamadas alertaron de que se estaba produciendo una pelea y patrullas de la Policía Local acudieron al lugar. Los agentes comprobaron que se trataba de una discusión entre dos hermanos en el rellano de la finca y los separaron. Metieron a uno de los contendientes en su vivienda, donde su madre lo responsabilizó de lo ocurrido y comenzó a abroncarlo.
La reacción del hombre fue furibunda. Sin que los agentes pudieran evitarlo, se abalanzó contra la mujer y le propinó un fuerte puñetazo en la cara que la hizo caer al suelo. Los policías redujeron y detuvieron al agresor, acusado de un delito de lesiones en el ámbito familiar, y solicitaron la presencia de un ambulancia para que la madre fuera atendida de las lesiones sufridas, explicaron fuentes policiales.
