Noche de fuegos en Manacor. Tres incendios intencionados, provocados en apenas una hora en la misma zona, quemaron ocho vehículos y pusieron en jaque a policías y bomberos. Las llamas causaron daños de diversa consideración en ocho vehículos, de los que un coche y dos motos quedaron totalmente destruidos. También sufrieron desperfectos las fachadas de las viviendas cercanas. La Policía Local y el Cuerpo Nacional de Policía investigan ahora quién y por qué pegó fuego a los vehículos. Las primeras pesquisas apuntan a que utilizó pastillas de encendido colocadas bajo los motores de los automóviles afectados. En ninguno de los siniestros hubo que lamentar heridos.

Fuentes policiales señalaron que la principal línea de investigación apunta a un acto de vandalismo, ya que los incendios fueron aparentemente indiscrimandos. El hecho de que el autor siguienta actuando a poca distancia del lugar en el que bomberos y policías trabajaban tras declararse los fuegos avala esta teoría.

El primer fuego fue descubierto poco antes de las doce y cuarto de la madrugada en la calle Bailén. Un vecino alertó de que estaba ardiendo una furgoneta y la Policía Local acudió al lugar. El dueño del vehículo había logrado contener las llamas, que no se extendieron y solo causaron daños en la parte delantera. Los agentes comprobaron que alguien había prendido una pastilla de encendido debajo del motor.

Oleada de fuegos

Cuando los policías todavía atendían ese servicio se declaró otro incendio a unos 300 metros de allí, en la confluencia de las calles Esperança y Artà. En este caso el fuego se extendió rápidamente a varios vehículos y fue necesaria la intervención de los Bombers. Los equipos de extinción trabajaron en el lugar durante algo más de una hora para sofocar las llamas. El incendio destruyó totalmente un Citröen C4 y dos motocicletas y causó daños en una furgoneta y un turismo. Además, las fachadas de dos fincas, en los números 9 y 11 de esa calle, resultaron afectadas por el fuego.

El tercer incendio comenzó a apenas 100 metros, en esa misma vía y junto a un colegio, cuando empezaron a arder dos furgonetas, una Ford Transit y una Citröen Berlingo. Ambos vehículos sufrieron cuantiosos daños antes de que las llamas fueran sofocadas.

La investigación sobre la oleada de incendios quedó en manos de la Policía Nacional. Los agentes tienen la certeza de que los tres fuegos fueron provocados por la misma persona. Ayer llevaron a cabo inspecciones oculares de los tres puntos en los que actuó el incendiario y se entrevistaron con vecinos de la zona en busca de pistas que permitan identificarlo.