Un vigilante de seguridad de una cervecería de s´Arenal ha aceptado ser condenado a pagar una multa de 900 euros por romper el tabique nasal de un puñetazo a un turista alemán. El acusado fue juzgado ayer en ausencia ya que se encuentra en Bulgaria, su país natal, y se ha comprometido además a indemnizar, junto a la propiedad del negocio y su compañía de seguros, a la víctima con 1.500 euros. Esta condena por un delito de lesiones es fruto de un acuerdo entre la defensa y la fiscalía, que reclamaba inicialmente dos años de prisión para el agresor.

Los hechos ocurrieron hacia las tres de la madrugada del 11 de julio de 2014, según relató ayer el perjudicado durante el juicio. El hombre explicó que estaba en la cervecería Bierkönig, en la calle del Jamón, y empezó a discutir con un amigo suyo. Dos vigilantes del local pusieron fin a la pelea y los expulsaron. Ya en la calle, su acompañante hizo un corte de mangas a los empleados, que fueron tras ellos. "Los ánimos estaban caldeados. Me giré y les dije que nos íbamos sin problemas", relató el perjudicado. Sin embargo, los vigilantes los siguieron. "El más corpulento vino a por nosotros. Vi cómo pegó a mi amigo, que cayo al suelo, y luego vino a por mí. Me dio un puñetazo en la cabeza y me caí", concluyó el perjudicado.

A consecuencia de la agresión, el joven explicó que tuvo que ser trasladado a un centro médico porque sufrió una fractura del tabique nasal. Tras denunciar los hechos, recorrió la zona con la Policía Nacional hasta localizar e identificar al agresor, como confirmó uno de los agentes.

La fiscalía imputaba al sospechoso un delito de lesiones por el que reclamaba dos años de prisión. Pero ayer, tras alcanzar un acuerdo con el abogado del acusado, Gregorio San José, rebajó su petición a una multa de 900 euros y una indemnización de 1.500 euros para la víctima. Las partes mostraron su conformidad con el acuerdo alcanzado y la magistrada dejó el caso visto para sentencia.