Un joven de 22 años, Christian M., murió ayer al estrellarse el coche que conducía contra un poste y una pared en una travesía de la carretera de Sóller, cerca de Son Reus, en Palma. Con él viajaba un amigo suyo, de 20, que sufrió lesiones leves y una gran crisis nerviosa. Según explicó, ambos regresaban a casa tras pasar la noche de fiesta cuando el conductor perdió el control a gran velocidad y colisionó contra el muro. Los bomberos tuvieron que rescatar el cuerpo de la víctima, atrapado en el habitáculo, y los servicios sanitarios solo pudieron certificar su muerte. La Policía Local abrió una investigación para esclarecer cómo se produjo el siniestro. Son ya cuatro las personas fallecidas a lo largo del mes de enero en accidentes de tráfico en Mallorca.

Poco después de las siete menos cuarto de la mañana, el Volkswagen Golf GTI en el que circulaban los dos jóvenes enfiló el camino del Destre, que enlaza el núcleo de sa Garriga con la carretera de Sóller. Ambos habían pasado toda la noche de fiesta y se dirigían a Palmanyola. Cuando el turismo, con el volante situado en la parte derecha, se encontraba a unos 100 metros del cruce el conductor perdió el control, impactó primero contra un poste de madera y se estrelló después contra la pared de un almacén.

Quedó atrapado

Varias llamadas alertaron a los servicios de emergencias, que se movilizaron de inmediato. Al lugar acudieron una UVI móvil del Ib-Salut y patrullas de la Policía Local de Palma. El conductor se llevó la peor parte. Quedó inconsciente y atrapado en el interior del turismo, cuya parte delantera quedó totalmente destrozada.

Una dotación de los Bombers de Palma se desplazó al lugar del siniestro y excarceló al joven, pero los servicios sanitarios no pudieron más que confirmar su muerte. La víctima fue identificada como Christian M., nacido en Argentina pero nacionalizado español, de 22 años. El fallecimiento fue comunicado al juzgado de instrucción número 8 de Palma, en funciones de guardia. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Palma para practicarle la autopsia.

El copiloto, de 20 años, apenas sufrió lesiones pero quedó muy impactado por la muerte de su amigo. Según explicó a los agentes de la Policía Local, los dos habían estado toda la noche consumiendo bebidas alcohólicas y cuando se produjo el siniestro circulaban a gran velocidad pese a la estrechez del camino. El joven fue trasladado a una clínica de Palma para ser atendido de las contusiones que presentaba.

El camino permaneció cortado durante unas dos horas, hasta que los agentes elaboraron un atestado, el vehículo siniestrado fue retirado por una grúa y los restos del automóvil que quedaron desperdigados por la calzado fueron retirados.

Este siniestro elevó a cuatro la cifra de personas fallecidas durante el mes de enero en las carreteras de Mallorca. El domingo día 10 los dos ocupantes de una moto -un joven de 27 años y una mujer de 34- murieron al colisionar contra un coche en un cruce a la entrada de Son Serra de Marina, en Santa Margalida. El domingo día 17un joven de 28 años perdió la vida al chocar su turismo contra un caballo que se había escapado de una finca en la carretera que une Inca y Lloseta. Durante el mes de enero del año pasado no hubo ninguna víctima mortal en las carreteras de la isla.