Si Cort no lo remedia pronto, un pequeño bache de la ciudad va a entrar en el libro Guinness de los récords. El agujero lleva varias semanas en la calzada de la plaza del Mercat, por la que pasan los clientes de una cafetería para ir del local a la terraza, y se ha cobrado ya al menos cinco víctimas. Dos de los afectados han sufrido lesiones graves, como son una fractura de peroné y un esguince de tobillo, al meter el pie en la oquedad. Los encargados del establecimiento avisaron hace varios días al Ayuntamiento y, pese a las promesas de que lo arreglarían, el socavón sigue ahí a la espera de nuevas víctimas.
"Yo los ojos los tengo bien"
En la Policía Nacional andan un poco mosqueados con los continuos errores de la prisión de Palma sobre los reclusos que deben ser trasladados al hospital. Esta misma semana, una mujer fue excarcelada para declarar en los juzgados y de ahí la llevaron a Son Espases. Según el centro penitenciario debía ser atendida en oftalmología. Cuando los agentes se lo comunicaron, la presa no salía de su asombro. "¡Pero si yo los ojos los tengo bien!", exclamó. En otra ocasión, un hombre fue trasladado a dermatología pese a que sufría una hernia inguinal e incluso un preso fue llevado a Son Espases pese a que el enfermo era su hermano.
Un 'zasca' en el juicio
En un juicio celebrado esta semana, un abogado quiso enmendar la plana a la fiscalía y la acusación particular, pero el tiro le salió por la culata. El letrado sostuvo en sus conclusiones que habían calificado asunto de forma errónea, sin tener en cuenta una reforma del código penal. Cuando acabó su alegato, la magistrada que presidía el juicio le recordó que esa modificación era posterior a los hechos, por lo que no podía ser tenida en cuenta.
Los tunos en la Audiencia
El pasado viernes al mediodía, la puerta de la Audiencia de Palma era un hervidero. Los periodistas se agolpaban frente al palacio de Justicia nada más conocer que la infanta Cristina iba a seguir en el banquillo de los acusados en el juicio de Nóos. Varios curiosos se aproximaron y preguntaron a los reporteros qué ocurría. Mientras tanto, los cámaras de televisión y fotógrafos esperaban nerviosos la salida de las tres magistradas que habían dictado el ansiado auto. De repente, un grupo de tunos, ataviados con sus capas y cintas multicolor, cruzó por la plaza del Mercat y pasó por delante de Can Berga. Bandurria en mano, dieron un toque festivo a la jornada de tribunales. Solo les faltó ponerse a cantar para animar al personal.
El incendio era un fogueró
El pasado fin de semana, los bomberos y la Policía Local de Marratxí se movilizaron con urgencia para acudir a un domicilio donde presuntamente se había declarado un voraz incendio. Un testigo alertó de que había visto grandes llamas que sobresalían por una de las calles. Cuando las patrullas llegaron al lugar, en sa Cabaneta, descubrieron que no se trataba de un siniestro, sino de un animado fogueró por las fiestas de Sant Antoni.
Via Alemania sin baños
A mediados de esta semana, los funcionarios, magistrados, fiscales y abogados añadieron a la lista de escasez de medios en los juzgados de Vía Alemania un nuevo contratiempo: los baños del edificio no funcionaban. Por suerte, esta situación no se prolongó más de un día. El motivo de la avería era una fuga en una de las tuberías de la sede judicial.
