Un delincuente multirreincidente perpetró dos atracos de Palma en apenas 24 horas. En uno de ellos esgrimió un cuchillo y en el otro se introdujo una mano en el bolsillo y simuló esconder una pistola. La Policía le detuvo el pasado viernes por dos robos con violencia e intimidación.

El primero de estos atracos lo cometió el pasado 23 de diciembre. Sobre las ocho de la tarde, el delincuente irrumpió en un establecimiento de artículos esotéricos situado en la calle Francesc Martí i Mora de Palma.

En primer lugar, el asaltante preguntó por la dueña del negocio. Acto seguido, sacó un cuchillo. "¡Dame todo lo que tengas!", espetó el atracador. La recaudación había sido exigua. La propietaria abrió la caja registradora y le entregó los apenas 80 euros que había en el interior.

Al ver el escaso botín, el delincuente hizo un ademán de arrepentimiento. "¡No quiero hacer esto!", exclamó el atracador mientras simulaba estar compungido. A continuación, le entregó a la dueña del negocio la mitad del botín, 40 euros, y huyó con el resto.

El aspecto desaliñado del asaltante había llamado la atención de la víctima. Tras interponer la correspondiente denuncia, la propietaria aportó una pormenorizada descripción del atracador. Los investigadores se hicieron cargo del caso para intentar capturarle.

El delincuente volvió a reincidir cuando todavía no habían transcurrido 24 horas de su último golpe. Así, sobre las seis de la tarde del pasado 24 de diciembre, el atracador se dirigió hacia una joyería situada en la calle Capità Vila.

El asaltante siempre escogía las horas próximas al cierre para perpetrar el atraco. En esta ocasión adelantó la hora, ya que contó con que el establecimiento cerraría sus puertas antes para celebrar la Nochebuena.

El atracador irrumpió sorpresivamente aprovechando que una dependienta se había quedado sola. "¡No grites, pero me vas a tener que dar todo!", sentenció.

Un botín de 50 euros

La amenaza no logró amilanar a la empleada de la joyería. La víctima cogió unas tijeras y las esgrimió para tratar de intimidar al asaltante. "Tengo algo más grande, una pistola, ¡suelta eso!", replicó el delincuente mientras mantenía una mano en un bolsillo. El atracador tan solo se hizo con un botín de 50 euros antes de emprender la huida.

Los investigadores del Grupo de Atracos no tardaron en identificar al asaltante. El delincuente, de 56 años, contaba con 18 antecedentes. Seis de ellos eran por robos con violencia e intimidación. El pasado viernes fue detenido por estos dos nuevos golpes en su historial delictivo.