Un accidente laboral costó ayer la vida a un hombre de 47 años en Muro tras desplomarse sobre él un cargamento de palés que transportaba en su tractor. La Guardia Civil abrió una investigación para averiguar cómo se produjo el fatal percance.

Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve y media de la mañana en una finca agrícola situada a la altura del kilómetro 2,900 de la MA-3430 que une Muro con sa Pobla. En concreto, el accidente laboral ocurrió en un camino que discurre paralelo a dicha carretera, informaron fuentes policiales.

Miguel S.M., de 47 años, se disponía a transportar un cargamento de palés que había colocado en su tractor. Al parecer, la víctima se percató de que tenía poca visibilidad y decidió elevar la pala con la pesada carga.

Esta maniobra fue la que supuestamente hizo que los palés se desplazaran y cayeran sobre él. Además, el terreno por donde transitaba el vehículo agrícola no era llano y tenía baches, lo que ayudó a la caída de las plataformas para portar mercancías.

Al ver a la víctima sepultada bajo los palés, los familiares y los testigos alertaron rápidamente a los servicios de emergencia para que acudieran en su auxilio. El grueso de la carga le había caído sobre la espalda. Las asistencias sanitarias del Ib-salut desplazaron hasta la finca de Muro una UVI móvil y una ambulancia convencional para atender al hombre.

Pese a la violencia del impacto de dos pesados palés, el conductor del tractor seguía aún con vida. Los facultativos realizaron denodados esfuerzos para intentar estabilizar sus constantes vitales. No obstante, la muerte le sobrevino al hombre por un fuerte traumatismo por aplastamiento y se vieron obligados a certificar la defunción.

Efectivos de la Policía Local de Muro también acudieron a la finca del payés nada más tener conocimiento de lo ocurrido. Se daba la trágica coincidencia de que el día de Reyes celebraría su cumpleaños.

Interrogantes

Finalmente, agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil se desplazaron a la parcela. En un primer momento, se plantearon varios interrogantes para determinar quién se hacía cargo de la investigación.

Las dudas giraron en torno a si se trataba de un accidente de tráfico o si se circunscribía al ámbito laboral. Finalmente, esta última hipótesis fue la que cobró mucha más fuerza y se consideró que respondía a lo ocurrido.

Los investigadores del Instituto Armado examinaron con detenimiento el tractor y los palés. Finalmente concluyeron que el siniestro se debía a un desplazamiento de la carga que transportaba en el vehículo agrícola.

Una vez que el forense había examinado el cuerpo del hombre, el juez de Inca ordenó el levantamiento del cadáver. Los operarios de los servicios funerarios trasladaron a la víctima hasta el Instituto Anatómico Forense donde le será realizada la autopsia.