La Audiencia Provincial juzgará la próxima semana a un hombre acusado de violar varias veces a una niña de once años en Maó, en Menorca. El acusado agasajó a la menor a través de mensajes de teléfono móvil y logró que la víctima acudiera a su domicilio al menos en ocho ocasiones para mantener relaciones sexuales. La fiscalía pide para el procesado diez años de cárcel por un delito agravado de abusos.

Los hechos, según el ministerio público, se remontan al mes de julio de 2014, cuando el acusado conoció a la menor y empezó a mandarle mensajes de Whatsapp, en los que le decía que le gustaba mucho y quería sexo con ella.

El mes siguiente, el procesado invitó a la niña a su casa, donde mantuvieron relaciones sexuales completas sin utilizar ningún método anticonceptivo. El ministerio público sostiene que estos encuentros se repitieron al menos ocho veces hasta que, en enero de 2015, las hermanas de la pequeña descubrieron los hechos y alertaron a la Policía.

El acusado reconoció los hechos ante los investigadores, por lo que la fiscalía considera que concurre la circunstancia atenuante de confesión.