Los Bombers de Mallorca rescataron ayer en Marratxí a una mujer que se tiró a un pozo de cinco metros de profundidad y acusó a su hijo de haberla arrojado. La víctima, que al parecer sufre un trastorno mental, fue liberada una hora después y trasladada en ambulancia a un hospital para ser atendida de las contusiones sufridas en la caída. La Policía Local y la Guardia Civil llegaron a dar batidas por la zona en busca del sospechoso, pero acabaron comprobando tras entrevistarse con varios testigos que nadie más había intervenido en los hechos.

El suceso ocurrió a mediodía en una finca situada en el camino de la Costa de Can Mas, a las afueras de sa Cabaneta. Un payés de la zona detectó la presencia de la mujer de mediana edad en los alrededores del pozo y tras descubrir que había desaparecido repentinamente se acercó allí. El hombre advirtió entonces que la víctima pedía auxilio desde el interior del aljibe y alertó a los servicios de emergencias. Varias patrullas de la Policía Local de Marratxí acudieron enseguida al lugar y comprobaron que la mujer, de origen árabe, estaba consciente y aparentemente no presentaba lesiones graves. El depósito tiene cinco metros de profundidad y había casi uno de agua. Tras intentar en vano rescatarla con sus propios medios, los policías solicitaron la intervención de los Bombers de Mallorca.

Acusación falsa

Los agentes empezaron a investigar lo ocurrido mientras aguardaban a los especialistas. La mujer, que apenas habla castellano, acusó a su hijo de haberla tirado al pozo y ofreció una descripción de la ropa que llevaba. Los policías, a los que se unieron varias patrullas de la Guardia Civil, llegaron incluso a dar batidas por la zona en busca del hombre. Sin embargo, tras entrevistarse con varios testigos, llegaron a la conclusión de que la acusación era falsa. La nuera de la víctima explicó que esta padece un trastorno mental y exculpó a su marido, y una vecina de la zona aseguró a los agentes que había visto cómo la mujer se tiraba al pozo sin la intervención de otras personas. Los agentes desactivaron entonces la búsqueda del sospechoso.

Dos dotaciones de los Bombers de Mallorca, procedentes del parque de Inca, se encargaron de rescatar a la víctima. Los especialistas descendieron al pozo con una escalera y la liberaron en pocos minutos.

La mujer presentaba varias contusiones y, aunque las heridas no parecían graves, una ambulancia del 061 acudió al lugar.

Los efectivos sanitarios la atendieron en el lugar de los hechos y optaron por trasladarla al hospital Son Llàtzer para que fuera sometida a un reconocimiento médico completo.