­La Audiencia de Palma ha rebajado la condena de dos años y medio a un año y nueve meses para un administrador de fincas de la ciudad por apropiación indebida por quedarse 17.800 euros de una comunidad de bienes de una familia a la que gestionaba los alquileres de 28 viviendas y locales entre 2013 y 2014. El tribunal estima el principio de proporcionalidad y cree exacerbada la pena. Por ello, la rebaja.