La fiscalía reclama penas que suman 35 años de prisión para seis presuntos miembros de una banda de ladrones por una oleada de robos, la mayoría de ellos en la comarca del Raiguer. Cuatro de los sospechosos se habrían dedicado a desvalijar viviendas, apoderándose de joyas y aparatos electrónicos. Los otros dos procesados daban salida a las alhajas al ser empleados de una joyería.

La acusación imputa a los cuatro autores materiales sendos delitos continuados de robo con fuerza en casa habitada y reclama para cada uno siete años y nueve meses de cárcel. Sus dos compinches están acusados de receptación y se enfrentan a dos años de prisión.

Según las conclusiones provisionales de la fiscalía, la banda actuó entre enero y abril de 2011. Los robos se sucedieron en domicilios habitados pero cuando los moradores no estaban. Durante esos cuatro meses, los acusados habrían entrado en viviendas de Santa Eugènia, Biniali, Marratxí, Lloseta, Alaró y Palma.

Los intrusos forzaron puertas y ventanas para acceder a los inmuebles, de los que se llevaron dinero en efectivo, ordenadores, televisores, cámaras de fotos y teléfonos móviles.

Los cuatro presuntos autores materiales solían repartirse el botín para luego venderlo por su cuenta en tiendas de segunda mano o de compraventa de oro. Para dar salida a las alhajas contaban con la ayuda de dos empleados de una joyería de Palma, que vendían el material robado a sabiendas de su origen ilícito.

La Guardia Civil, que detuvo a los seis miembros de este grupo a principios de mayo de 2011, logró recuperar solo una parte de los efectos robados. Por ello, la fiscalía pide que los cuatro hombres acusados de ser los autores materiales de los robos indemnicen a las víctimas con más de 17.000 euros por los efectos que no han aparecido y el dinero en metálico que les sustrajeron.

El juicio por estos hechos se celebrará en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma. Está previsto que la vista se inicie el próximo martes y concluya el jueves. La fiscalía ha citado a declarar, además de a los acusados, a los perjudicados y a los agentes de la Guardia Civil que investigaron los hechos.