La fiscalía de Palma solicita 20 años de prisión para un hombre acusado de someter a abusos sexuales a sus dos hijas. El ministerio público sostiene que durante cuatro años sometió a las menores a tocamientos aprovechando los baños. Esta situación se prolongó desde 2004, cuando las pequeñas tenían dos y cuatro años, hasta 2007. Está previsto que el juicio por estos hechos se celebre la semana próxima en la Audiencia Provincial.

De acuerdo con las conclusiones provisionales del fiscal, el procesado, de 47 años y con antecedentes por otros delitos, aprovechó que era el único progenitor custodio de sus dos hijas para someterlas a tocamientos con ánimo libidinoso. Durante cuatro años, el hombre habría manoseado a las pequeñas en sus zonas íntimas con la excusa de aplicarles pomada en los genitales tras bañarlas. El caso salió a la luz en marzo de 2007, cuando un juzgado de Palma prohibió al acusado acercarse a sus hijas y el Consell asumió su tutela.

El fiscal considera al sospechoso autor de dos delitos continuados de abuso sexual y reclama 30.000 euros de indemnización para cada una de las víctimas.