­Una pasajera ha sido condenada a cuatro meses de prisión por un hurto por quedarse un reloj de lujo valorado en unos 5.000 euros que otro viajero se había dejado olvidado en la cinta del control de seguridad en el aeropuerto de Palma. La sospechosa confesó los hechos en un procedimiento de juicio rápido celebrado en la capital balear. La sustracción del valioso reloj de marca Breitling ocurrió hace unos días en Son Sant Joan cuando la mujer atravesó el arco de seguridad de la terminal y se percató de que en una cinta se hallaba la alhaja. La pasajera la cogió y fue interceptada en la cola de embarque.