La fiscal rebajó ayer su petición de condena de 15 años y medio de cárcel a 12 y medio para el policía nacional acusado de dos detenciones ilegales, denuncia falsa y extorsión, por retener e increpar a un ciudadano peruano y a otro italiano en Palma y Eivissa, respectivamente. El ministerio público redujo su solicitud de pena al apreciar la circunstancia atenuante de reparación del daño, ya que el sospechoso consignó 1.200 euros antes de la vista oral.

Por su parte, el letrado defensor calificó los hechos como coacciones y una falta con varias atenuantes y propuso dos alternativas por detención ilegal respecto del caso ocurrido en Palma, ya que por el de Eivissa pide la absolución al mantener que la actuación del policía fue correcta. Ayer el juicio quedó visto para sentencia. "Siento mucha vergüenza por mis hechos, estoy suspendido desde 2012, he hecho mucho daño a la gente que quiero", dijo el acusado.