Una apuesta al trile de unos turistas franceses en s'Arenal se convirtió en un intento de linchamiento. Unos 150 miembros de Los Bustamante, un conocido clan de trileros, acorraló a las víctimas, que se tuvieron que refugiar en la cocina de bar. Agentes de la Policía Local tuvieron que establecer un cordón para rescatar a los aterrados galos y que interpusieran la correspondiente denuncia por un presunto delito de robo con violencia y amenazas.

Los hechos se produjeron sobre las 23.20 horas del pasado domingo en la confluencia de las calles Cartago y Fita de la Playa de Palma. Un grupo de turistas franceses vio a una 'colla' de trileros y se decidió a probar suerte.

A continuación, una mujer francesa sacó un billete de 50 euros del bolso con la intención de apostarlo, pero no llegó a su destino. De repente, uno de los miembros de la banda le arrebató el dinero de un fuerte tirón. A continuación, los trileros abandonaron el lugar apresuradamente.

Los turistas franceses no se resignaron a perder el dinero y fueron tras ellos. Finalmente, los galos consiguieron dar alcance a una de las integrantes del grupo de trileros, a la que le exigieron que le devolvieran los 50 euros que les había arrebatado.

A partir de este momento, comenzaría una aterradora experiencia de los turistas. Al verse acorralada, la mujer del clan de Los Bustamante pidió ayuda a gritos a sus compinches.

La respuesta no se hizo esperar. Un nutrido grupo de los miembros de la banda salió a la calle desde diversos portales vociferando e increpando a los turistas. Ante su actitud manifiestamente hostil y en vista de que podría peligrar su integridad, la media docena de franceses optó por buscar un lugar donde refugiarse.

Finalmente, los turistas se guarecieron en un bar situado en el limítrofe municipio de Llucmajor. Las víctimas se temieron que la turba pudiera adentrarse en el establecimiento para sacarlos por la fuerza y agredirles. Por este motivo, se cobijaron en la cocina del local.

Desde el interior del local, las víctimas llamaron a la Policía pidiendo ayuda desesperadamente, mientras el cerco de la banda de trileros se estrechaba.

Un dispositivo policial especial se movilizó en torno al establecimiento donde se habían refugiado los turistas franceses para socorrerlos. Al encontrarse en un punto entre Palma y Llucmajor, el aviso se hizo extensivo a la Policía Local de este último municipio y a la Guardia Civil. Una patrulla de la Policía Nacional también se sumó al operativo.

Efectivos del Grup d'Actuació Preventiva (GAP), del Grupo de Refuerzo de Seguridad Turística en la Playa de Palma (Setur) y de la Unidad Nocturna de la Policía Local acudieron al rescate de la media docena de turistas franceses guarecidos en el bar.

Ataque de pánico

Los agentes se encontraron a las seis víctimas presas de un ataque de pánico. Hasta el punto de que llegaron a temer por su vida. Los policías, por su parte, establecieron un cordón de seguridad para contener a la turba que les increpaba y amenazaba con agredirles.

A continuación, los agentes tranquilizaron a los turistas y les subieron a un coche para conducirlos a dependencias policiales para que pudieran interponer la correspondiente denuncia por un presunto delito de robo con violencia y otro de amenazas.