Máxima tensión en Canyamel. Un empresario marroquí se encaramó ayer de madrugada a una grúa de un complejo hotelero y amenazó con tirarse al vacío si no le abonaban los 80.000 euros que supuestamente le adeudaban. Tras 11 interminables horas, el hombre depuso su actitud sin lesionarse gracias a la encomiable labor del negociador de la Guardia Civil.

El incidente se inició sobre las cinco de la madrugada en unas obras del Hotel Park Hyatt Mallorca de Canyamel, situado en el término municipal de Capdepera. El titular de una subcontrata de la reforma en el complejo aprovechó su perfecto conocimiento de la zona para esquivar a los vigilantes de seguridad y subirse a la grúa.

Una vez que se encontraba a una considerable altura, en torno a unos 15 metros, el hombre comenzó a gritar. El empresario amenazó con saltar al vacío si la contrata de las obras no saldaba la supuesta deuda de 80.000 euros que, según sus palabras, había contraído con su negocio.

De inmediato, un dispositivo especial de emergencia se activó en torno al Hotel Park Hyatt de Canyamel. Una dotación de Bombers de Mallorca desplegó un colchón hinchable para tratar de amortiguar una supuesta caída del empresario.

También se personaron en el lugar efectivos de la Policía Local de Capdepera y las asistencias sanitarias del Ib-salut. Finalmente, agentes de la Guardia Civil se hicieron cargo del caso y establecieron un cordón de seguridad en torno a la grúa.

"¡No voy bajar hasta que no me paguen!", clamó a gritos el empresario magrebí desde la grúa. Según sus palabras, la titular de la contrata de las obras le adeudaba una suma de dinero en torno a los 80.000 euros. El hombre aseguraba que no podía hacer frente a los pagos a la Seguridad Social y a Hacienda hasta que no se saldara por completo esta supuesta deuda contraída con él.

Detalle del empresario, en un círculo, subido a la grúa. BIEL CAPÓ

El negociador de la Guardia Civil acaparó un papel protagonista en la situación conflictiva. Una psicóloga también asesoró al especialista del Instituto Armado para minimizar los riesgos, mientras ambos se encontraban a pie de obra.

Momentos de tensión

Durante las interminables horas, se vivieron momentos de tensión. El empresario amenazó repetidamente con lanzarse al vacío si no cumplían con sus pretensiones.

Con el paso de las horas, el negociador de la Guardia Civil se fue ganando paulatinamente la confianza del empresario. Hasta que, por fin, sobre las cuatro de la tarde decidió descender de la grúa. Fue trasladado al Hospital de Manacor para ser sometido a exploración psiquiátrica.

Desde el Hotel Park Hyatt de Capdepera subrayaron que el establecimiento "está al corriente de pago con la contrata titular de las obras".

Por su parte, el responsable de UGT del Llevant y el Migjorn, Guillem Badell, abundó que la contrata "pagará hoy a una subcontrata en el sindicato el dinero que se le adeuda". El sindicalista achacó el incidente a "un fallo de los organismos públicos al controlar la situación".