Un gato callejero se ha librado esta semana por los pelos de que le cayera un denuncia. Una mujer se presentó el miércoles en los juzgados de Vía Alemania y explicó que quería denunciar a un gato que no la deja dormir con sus maullidos. El trabajador que la atendió tardó unos instantes en salir de su asombro, pero cuando lo hizo echó mano del ingenio para poner fin a ese despropósito jurídico. "Pero, ¿usted sabe cómo se llama el gato? Porque si no, a ver contra quién pone la denuncia...", le dijo. La mujer se quedó pensativa. "Claro, claro... Tendré que averiguarlo", comentó antes de dar media vuelta y marcharse del edificio.
Marihuana, material escolar
En un exclusivo colegio de Palma, privado y religioso, habían notado en las últimas semanas un intenso olor. La dirección del centro puso los hechos en conocimiento de la Policía, que hace unos días acudió al centro escolar con perros especializados en la detección de drogas, para sorpresa de los escolares. Los agentes encontraron durante la inspección sendas bolsitas de marihuana en las mochilas de tres alumnos de entre 13 y 14 años, por lo que levantaron actas de intervención. Por su parte, los responsables del colegio han decidido expulsar a los alumnos durante cinco días por haber acudido al colegio con droga.
Víctima ausente
En el juicio celebrado esta semana contra Virgilio, el histórico carterista de Palma, no compareció la víctima. La mujer reside en Escocia y cuando la citaron para que regresara a Mallorca y declarara en la vista pidió a su agencia de viajes que le adelantara el coste del desplazamiento y el alojamiento en la isla. Pero denegaron su petición y anunció que no vendría. La fiscalía solicitó en su lugar que se leyera durante la vista oral la declaración que había hecho a la Policía el día de autos.
Virgilio, de más a menos
Cuando el carterista entró en la sala para ser juzgado estaba muy enfadado. Casi a gritos, anunció a la jueza que quería cambiar de abogado porque el suyo le había recomendado que aceptara un año y medio de prisión. La magistrada le explicó que no podía, porque era un letrado de oficio, pero que tenía opción de negarlo todo durante el juicio. Virgilio se serenó y la vista se celebró con normalidad. "Felices fiestas", deseó cuando acabó la vista, arrancando una sonrisa a la jueza, la fiscal y su abogada.
Mal olfato, peor oído
Una vecina de sa Indioteria llamó el jueves por la tarde a los servicios de emergencias porque percibía un fuerte olor a gas procedente de un piso de su finca. La Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional se movilizó de inmediato. Los agentes llamaron a la puerta pero nadie abrió, pese a que se oía un televisor a todo volumen. Temiendo que a la moradora le hubiera pasado algo, accedieron por un balcón y comprobaron que el único problema era que la señora tiene serios problemas auditivos. Y del olor a gas, ni rastro.
Policías y bomberos solidarios
Varios miembros de Policías Sin Fronteras, una ONG que agrupa a policías locales de diferentes municipios de Mallorca, han visitado esta semana las plantas de pediatría de Son Espases para llevar regalos a los niños ingresados. También representantes de la Agrupació d'Oci, Cultural i Esportiva de los Bombers de Mallorca y agentes de varios grupos de la Policía Nacional han acudido al centro hospitalario para dar una alegría con sus presentes a los más pequeños y hacerles más llevadera su estancia durante las navidades.
