Los investigadores confían en que los análisis de nuevas pruebas físicas relacionadas con la desaparición de la chica de 15 años Malén Ortiz el pasado 2 de diciembre en Calvià arrojen luz sobre el suceso y faciliten la localización de la adolescente.

"Estamos pendientes de los resultados que tienen que venir de Madrid", aseguró ayer la delegada del Gobierno en Balears, Teresa Palmer, que confirmó que se están estudiando evidencias materiales que pueden dar pistas sobre las circunstancias de la desaparición.

Tras participar en la celebración en Palma de la Pascua Militar, la delegada del Gobierno subrayó que "la búsqueda sobre el terreno es constante", a pesar de que hace ya más de un mes que la chica falta de su casa.

"La Guardia Civil nunca ha descartado ninguna de las hipótesis: huida voluntaria o desaparición forzosa", aunque en principio se dio más verosimilitud a la posibilidad de que se hubiera marchado voluntariamente, indicó. Posteriormente, añadió, "hubo un cambio de evidencias, de pruebas", que hicieron que los investigadores consideraran más probable la desaparición forzada.

El pasado jueves se cumplió un mes desde que fuera vista por última vez en una parada de autobús en Son Ferrer (Calvià) Malén Ortiz, de cuyo paradero sigue sin haber rastro a pesar de la intensa búsqueda llevada a cabo en la zona y de los llamamientos de su familia.

Durante toda la semana pasada decenas de guardias civiles, bomberos, policías locales y voluntarios de Protección Civil rastrearon de manera exhaustiva el área próxima al lugar donde se tuvo la última noticia de la chica.

De hecho, durante esta minuciosa búsqueda la Guardia Civil recopiló diversos restos, tanto en las proximidades del vivero de Son Ferrer como en toda la franja hasta la costa de Calvià. Todos estos restos, la mayoría piezas de ropa, fueron trasladados a los laboratorios de la Guardia Civil, con la esperanza de poder determinar de forma científica si alguno de ellos pertenecía realmente a la joven desaparecida.

La muchacha fue grabada por la cámara de seguridad de la gasolinera de Son Ferrer el 2 de diciembre. Es la última evidencia que se tiene sobre ella.