No escatimaban muestras de cariño y afecto hacia los ancianos que acababan de conocer. Por medio de insinuaciones, caricias y abrazos se ganaban su confianza. En algunos casos, incluso, dejaban que les tocasen los pechos. A continuación les sustraían todos los objetos de valor que llevaban consigo.

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Jefatura Superior de Balears detuvieron a un joven de 20 años y a una chica de 19 años , ambos de nacionalidad rumana, como presuntos autores de una decena de robos con violencia y hurtos al descuido.

La investigación policial se remonta al pasado mes de agosto. Los agentes cayeron en la cuenta de que una serie de denuncias eran milimétricamente iguales. Las víctimas eran siempre personas de edad avanzada. En cambio, las ladronas eran muy jóvenes.

El ´modus operandi´ que utilizaban para cometer las fechorías era muy similar. Dos mujeres se acercaban a las víctimas y decían formar parte de una asociación de ayuda a personas necesitadas.

En principio, las delincuentes portaban carpetas y les reclamaban a las víctimas una firma de apoyo a su causa para propiciar el acercamiento. Como prueba de agradecimiento, les daban un fuerte abrazo. En realidad, les estaban sustrayendo los objetos de valor que llevaba consigo al descuido. Cuando veían que no podían robarles los efectos sin que se dieran cuenta, no tenían reparos en utilizar la violencia.

El comportamiento de las delincuentes tenía sutiles variaciones en función de si la víctima era un hombre o una mujer de edad avanzada. Si el objetivo era femenino, abrazaban a la mujer y le decían que le recordaba a su abuela. Estas muestras de afecto las intercalaban con violencia. De un fuerte tirón le arrancaban la cadena de oro que portaba en el cuello antes de emprender la huida.

Si su víctima era un hombre de edad avanzada, hacían un considerable despliegue de todas sus artimañas para engatusarle y conseguir que bajara la guardia. La distracción la aprovechaban para sustraerle los objetos de valor.

Cuando el anciano se oponía frontalmente, recurrían a la violencia. En este caso, las dos jóvenes que le habían abordado contaban con la colaboración de otros miembros de la banda. Los hombres que se encontraban dentro de un vehículo para facilitar la huida, tomaban parte y desvalijaban a la víctima.

´Operación Abrazo´

Ante el aluvión de denuncias de similares características, los investigadores de la Policía Nacional activaron la denominada ´Operación Abrazo´. Las pesquisas se centraron en sus zonas preferidas de actuación.

El grupo tenía una gran movilidad. Actuaba en Mallorca durante cortos periodos de tiempo, luego se les perdía el rastro. En realidad se desplazaban a la península, donde continuaban con sus fechorías.

Los investigadores tienen constancia de que los miembros de esta banda ha efectuado delitos similares en Vitoria, Galicia, Valencia y Barcelona, entre otras localidades.

A principios del presente mes de noviembre, la Policía detectó la presencia de los miembros de esta banda de nuevo en Mallorca. De inmediato se activaron diversos dispositivos policiales para proceder a su detención.

Las pesquisas dieron finalmente sus frutos. Dos miembros de la organización -una joven de 19 años y un chico de 20- fueron interceptados cuando se disponían a abandonar la isla. Hasta el momento se ha esclarecido una decena de robos con violencia y hurtos cometidos en Mallorca.

Asimismo, los agentes han intervenido el coche que utilizaban para los desplazamientos. Lo cambiaban en cortos periodos de tiempo. Dentro había una joya, documentación, dos móviles y numerosas prendas de vestir.