Las autoridades rusas están investigando a un compatriota, un empresario millonario afincado en Palma, por un presunto fraude que ascendería a varios millones de euros en su país. Una comisión rogatoria, integrada por tres agentes del Servicio Federal de Seguridad, llegó a la isla procedente de Moscú para llevar a cabo las pesquisas pertinentes. Ayer por la mañana, un magistrado de Palma tomó declaración a un testigo en relación a este caso, siguiendo la petición efectuada por las autoridades rusas a través de una comisión rogatoria.

Los agentes desplazados expresamente desde Moscú estuvieron presentes en varias de las diligencias practicadas ayer. La Policía Nacional se encargó de los trámites y averiguaciones acerca del magnate. Así, los investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) tenían previsto llevar a cabo ayer un registro en el domicilio del empresario ruso investigado, un chalé en una lujosa urbanización de Palma.

Tanto la inspección en la vivienda como la toma de declaración del testigo fueron autorizadas por el magistrado del juzgado de instrucción número 7 de Palma, Antoni Garcias, que fue quien recibió la comisión rogatoria desde Rusia.

Las autoridades de ese país llevaban varios meses tras la pista del magnate. El empresario al parecer vive a caballo de varias ciudades. Los investigadores tuvieron conocimiento de que el hombre iba a pasar el mes de agosto en un chalé en Palma, por lo que decidieron actuar y tomarle declaración en calidad de testigo. Según las pesquisas de los agentes rusos, se está investigando un entramado que habría defraudado más de seis millones de euros en su país, por lo que el caso versa sobre delitos económicos.