La Guardia Civil detuvo el pasado lunes en el aeropuerto palmesano de Son Sant Joan a una mujer que presuntamente ejercía las funciones de ´correo´, tras ser sorprendida con un alijo de droga oculta en la vagina. Se trata de una pasajera, de unos 40 años de edad y de origen colombiano, que está acusada de un delito contra la salud pública por introducir sustancias estupefacientes en la isla. La sospechosa supuestamente transportaba en un preservativo en su zona genital 230 gramos de cocaína. Ayer al mediodía, ingresó en prisión por orden judicial.

La pasajera fue arrestada nada más aterrizar en Palma en un vuelo procedente de Valencia operado por una compañía aérea de bajo coste. Su nerviosismo y sus prisas la delataron ante los investigadores del Instituto Armado.

Los hechos fueron descubiertos el pasado lunes, aproximadamente a las cuatro de la tarde, cuando la viajera llegó a la isla en un avión que había despegado de Valencia. Su actitud en seguida despertó las sospechas de los agentes. La mujer se mostró muy alterada y salió con mucha prisa de la terminal. Llevaba un bolso de mano únicamente como equipaje. Los investigadores del puesto de Son Sant Joan se aproximaron a ella y le pidieron que se identificara.

Exploración

Ante los indicios de que pudiera ser una ´correo´ a las órdenes de una organización de narcotraficantes, los agentes pidieron a la pasajera que les acompañara y la sometieron a una exploración.

Poco después, la Guardia Civil comprobó que la mujer transportaba en el interior de su organismo un alijo de droga. En su vagina, llevaba un preservativo que contenía una sustancia de color blanco que parecía ser cocaína. Los estupefacientes fueron aprehendidos por los investigadores. En total, la droga intervenida arrojó un peso de 230 gramos.

Ante las pruebas recabadas, la Guardia Civil del aeropuerto de Palma procedió a detener a la sospechosa por un delito contra la salud pública.

Un día después, ayer por la mañana, la arrestada fue trasladada hasta el juzgado de instrucción número 2 de Palma, en las dependencias de Vía Alemania, que se encontraba en funciones de guardia.

Tras prestar declaración ante el magistrado de guardia, la pasajera fue conducida al mediodía a la prisión de Palma por orden del juez. La Guardia Civil sorprendió a la viajera durante un control rutinario en la terminal de llegadas de Son Sant Joan.