La Guardia Civil ha intervenido una partida de 6.900 punteros láser prohibidos en un almacén de venta al por mayor en Marratxí. La incautación se ha producido en el marco de una campaña contra la distribución de estos artilugios, cuyo uso está prohibido salvo casos profesionales muy específicos, después de que se hayan detectado varios ocasiones en los que han puesto en riesgo la seguridad de aviones a punto de aterrizar en el aeropuerto de Palma.

Desde hace varios años estos punteros se han convertido en uno de los objetos de moda entre los turistas, sobre todo de la zonas de Calvià y s´Arenal, donde numerosos vendedores ambulantes los ofrecen.

Muchos turistas juegan a apuntar con los haces de luz a los aviones que realizan las maniobras de aproximación al aeropuerto de Palma, lo que ha generado quejas por parte de los pilotos. Según explican, la potente luz puede dejarles sin visión en un momento crítico, lo que podría causar una catástrofe aérea.

Tras recibir estas quejas, desde la Delegación del Gobierno se puso en marcha un protocolo para evitar tanto la venta de estos artilugios como su utilización contra los aviones.

Este protocolo preveía una serie de inspecciones en comercios y almacenes que abastecen a vendedores ambulantes, donde se presumía que podría haber grandes partidas de estos objetos. El pasado 10 de julio, agentes de la Patrulla Fiscal y de Fronterras (Pafif) de la Guardia Civil de Calvià inspeccionaron uno de estos almacenes ubicado en Marratxí. Allí encontraron varias cajas que contenían un total de 6.900 punteros, que fueron intervendios.

Fuentes de la Guardia Civil informaron de que este tipo de punteros, de clase 3 o superior, solo pueden ser empleados para un uso profesional específico. Una mala utilización puede provocar lesiones en la vista y cegueras temporales. Su venta solo puede hacerse con unas determinadas medidas de seguridad y etiquetaje. Apuntar con uno de esos aparatos contra un avión, en especial durante las maniobras de aproximación a los aeropuertos, puede constituir un delito, recogido en la Ley de Navegación Aérea.