Zouhair A.R., el asesino de Nuria Orol, condenado el pasado mes de mayo a 15 años de prisión por matar de dos puñaladas a la joven el 24 de octubre de 2011 en el Port d´Andratx, fue excarcelado ayer por la mañana para ser juzgado por varios episodios de maltrato a la víctima, ocurridos un mes antes del crimen en Palma. El recluso, de 39 años, fue trasladado al edificio judicial de Vía Alemania bajo fuertes medidas de seguridad, pero finalmente la vista oral se suspendió debido a la incomparecencia de un testigo.

La fiscalía reclama para el asesino marroquí penas que suman un año y medio de cárcel y una multa al considerarle responsable de dos delitos de maltrato y dos faltas de vejaciones injustas.

Los hechos se remontan a septiembre de 2011, un mes antes de que Nuria Orol muriera de dos cuchilladas en el pecho a manos del acusado en su apartamento en el Port d´Andratx, cuando la joven, de 24 años y madre de dos hijos, supuestamente fue agredida y humillada. Según la versión del ministerio público, en una ocasión, entre las dos y media y las tres y media de la madrugada, Zouhair insultó a su pareja sentimental a las puertas de un restaurante en Palma. Acto seguido, le propinó tres tortazos, uno de ellos en la cabeza, que hizo perder el equilibrio a la víctima. Cuando la muchacha cayó al suelo, el imputado supuestamente continuó pegándole patadas. La perjudicada no acudió a ningún centro médico ni consta que sufriera lesiones.

Tres días después, el sospechoso lanzó unos zapatos a la joven mientras la increpaba y le decía comentarios obscenos. Este nuevo episodio violento ocurrió a las cuatro de la mañana en la calle Isaac Peral. Zouhair A.R. le tiró una bolsita que presumiblemente contenía cocaína y la víctima se quedó llorando media hora hasta que finalmente se marchó.

Por último, otro día en ese mismo lugar, el asesino de origen marroquí dio tres tortazos en la cara a Nuria Orol, que cayó al suelo boca abajo, según se desprende del escrito de acusación. La perjudicada nuevamente se quedó llorando en la calle y no consta que sufriera heridas.